La artista ariqueña Malú Mora se embarcó a mediados del 2021 en un viaje de ida sin precedentes bajo un nuevo nombre: MARÍA, un proyecto en el que no solo explora el pop con una mayor cuota de erotismo, sino que también se extiende hacia lo audiovisual.
En su primera muestra, “DIOSTESALVE – Génesis: 1”, la artista revela una historia mercada por la reivindicación de la oscuridad, el empoderamiento sin reglas morales, la exposición de las culpas y el pulso de la rabia como una capa roja justiciera para proteger al disidente y apuntar al abusador.
Para iniciar este 2022, MARÍA presenta una segunda pieza: “MÍRAME – Magdalena: 2”, un inquietante track en el que mezcla la elegancia del pop de pulso lento y ciertos guiños al pop francés noventero.
Su creadora explica que, en este segundo capítulo, MARÍA “baja del omnisciente al mundanismo y habla del momento en donde nos damos cuenta que dejamos de amar a una persona. Algo que no pasa cuando las relaciones terminan, sino que mucho tiempo después”.
“La letra es simple y cotidiana: desde hablar de pequeñas cosas que aburren de la pareja, como esperar afuera del baño mientras el otro se arregla, a reírse de esa rabia que te pueden tener por terminar una relación”, agrega.
Con Francisco Victoria y Cocó a cargo de la producción, MARÍA además figura como directora del video junto a Tomás Montealegre y se hace acompañar de dos compañeras de ruta, Natisú y Camila Moreno, quienes tienen sus momentos en el clip.
