El primer show masivo de Paloma Mami sería el 12 de enero de 2019, cuando público de todas las edades se acercaran al escenario Jorge González en La Cumbre. Con la postergación del evento, el misterio que significaba un show en vivo de la chileno-estadounidense quedó en manos de Lollapalooza Chile y las expectativas eran altas.
Quedaban 45 minutos para que el enigma se resolviera y el público amenazaba con colapsar el Lotus Stage. La gente no paraba de llegar a uno de los escenarios alternativos de Lollapalooza, alejado del furor de la elipse del Parque O’Higgins, con las dificultades y desniveles propios del terreno que se pisaba.
Nada importó para los miles de asistentes que llegaron a la cita con Paloma Mami, que ocupaba una de las menores duraciones del festival desde que se asentó en Chile: 20 minutos.
Entre el prejuicio de los curiosos que alcanzaron a entrar y la euforia de los fanáticos, Paloma Mami acaparó el escenario. De punta en blanco, el corto setlist se inicia con “Don’t Talk About Me”, canción que no es parte de su catálogo en el streaming y que dedica a sus haters.
“En dos meses yo ya llegué al millón, prepárense que esto recién comenzó”, reza el tema al que Paloma parece honrar palabra a palabra.
La chica criada en Nueva York se toma un momento para procesar lo que ven sus ojos. La euforia está desatada y ella es la causante. Ya no hay vuelta atrás, ni para ella ni para sus fans, quienes por primera vez tienen la oportunidad de escucharla lejos del streaming y los celulares que usan para registrar cada segundo del espectáculo.
“Not Steady”, su primer single oficial y que ya acumula 39 millones de reproducciones en YouTube, es el encargado de continuar la jornada de trap en el Lotus Stage. Ni los rápidos versos en inglés entrampan una multitud subyugada a los movimientos y letras de la ex chica Rojo.
Un DJ, cuatro bailarinas y un poco de humo son los únicos acompañantes de Paloma Mami en el escenario, hasta que la presencia de un violinista adelanta la siguiente canción: “Fingías”, que con un confuso historial de filtraciones y cambios de nombre a cuestas, fue lanzado de forma oficial hace pocos días.
El despecho dio paso al empoderamiento de “No te enamores”, última canción del setlist que contó con la presencia de DJ Luian, productor del tema, en el escenario. “La que puede, puede y yo puedo” fue una de las frases que más resonó en el lugar, consolidando su calidad de consigna entre gran parte de las mujeres presentes.
Cuando el show termina, ya no hay misterios por resolver. Paloma Mami trasladó el éxito virtual de millones de reproducciones al mundo real y ahora solo quedan elementos que pulir.
Si Paloma Mami es capaz de colapsar uno de los escenarios alternativos de Lollapalooza con apenas cuatro canciones, qué duda cabe de lo que podría lograr con un repertorio más nutrido y ubicada, sin prejuicios ni subestimaciones, en un escenario que albergue a todo el público que fue capaz de convocar.
Su éxito en Lollapalooza Chile se convirtió en su mejor carta de presentación y, con seguridad, en una invitación inmediata a regresar.