Si bien Coldplay ha hecho una gran carrera musical (veinte años desde la formación de la banda), siempre va a ser recordado su disco debut Parachutes como el mejor disco de la banda conformada por Chris Martin, Johnny Buckland, Guy Berryman y Will Champion, quienes escribieron todas las canciones del disco lanzado un día como hoy 10 de julio, pero en el 2000.
Antes del debut de su primer disco de estudio, la banda británica había lanzado dos EP con sellos independientes que los dieron a conocer en el país europeo, pero no fue hasta el lanzamiento de Parachutes (2000) que la banda se ganó el respeto a nivel mundial, ganando inclusive un Grammy a Mejor álbum de música alternativa en el 2002.
Se sabe que ninguna banda es la misma que en sus inicios, y eso es lo que le pasa a Coldplay contantemente, pues después de X&Y (2005), ha tenido contantes cambios en su estilo y estética musical, dejándose llevar por las influencias de la música actual.
Haciendo honor al nombre del disco, cada canción de Parachutes te hace sentir que vas aterrizando en un paracaídas, porque a pesar de que vas cayendo tienes algo que asegura tu caída. Sus canciones son enteramente depresivas y “dedicables”, son canciones que te hacen pensar en esa persona o que describe perfectamente una situación particular de tu vida.
Hoy, después de dieciséis años desde su lanzamiento (10 de julio de 2000), Parachutes sigue siendo uno de los mejores discos del último siglo en Reino Unido y también parte de la banda sonora personal del mundo.
Portada.
La portada del álbum es una fotografía tomada con una Kodak de un globo terráqueo, adquirido por 10 libras en la tienda minorista WHSmith. El globo se puede visualizar en algunos vídeos musicales y en presentaciones en vivo de la gira promocional del disco.
Parachutes.
Don’t Panic es la canción que te da la bienvenida, con su famoso estribillo “We live in a beautiful world”. Te hace una promesa intrínseca de todo lo que el disco te entregará, pues es la canción más esperanzadora del álbum. La segunda canción es Shiver, la cual puede ser descrita como agradablemente relajada y sublime, con ese coro romántico y desesperado que la ha convertido en una de las canciones preferidas de la fanaticada de la banda. Luego viene Spies y Sparks, dos canciones románticas y con una melodía suave (la típica melodía característica de Coldplay). Y después de esas dos canciones, viene la hermosa Yellow, esa canción que te pone los pelos de punta, que te cierra la garganta y te pone los ojos húmedos, esa canción que en vivo tiene que ser con un público con globos amarillos y con un coro tan coreado como un clásico de rock de los 80s. Después están Trouble, Parachute, High Speed y We Never Change, cuatro canciones que te sumen en la profunda depresión y que si la escuchas con el corazón roto, no te asegura una recuperación temprana, más bien la empeora. Y al último de la cola, el disco finaliza con Everything’s not lost, la cual cierra a la perfección la obra Parachutes.
Singles.
Los cuatro singles escogidos son Shiver, Yellow, Trouble y Don’t panic. Shiver se convirtió en el sencillo principal de Reino Unido y Yellow en Estados Unidos.
Shiver, 6 marzo 2000.
Yellow, 26 junio 2000.
Trouble, 23 octubre 2000.
Don’t Panic, 19 de marzo 20001.
Te dejamos a continuación el disco completo AQUÍ para que entiendes porque después de siete discos en el cuerpo, Coldplay no ha superado a su primer trabajo y quizás no lo haga, pero como te dicen en el disco: don´t panic, everything’s not lost.
