Una helada noche de otoño se vivió ayer en el Teatro la Cúpula junto al dúo canadiense Crystal Castles. Un grupo selecto que esperaba con ansias desde su última aparición el 2013 en Lollapalooza, coreó y saltó al ritmo de esa electrónica con un aire underground que se ha perdido de a poco ante su masificación.
Todo comenzó cuando el polémico logo de Madonna con un ojo golpeado apareció y el dj set se cortó repentinamente. Los gritos de emoción ante la aparición de la nueva vocalista Edith Frances se hicieron notar en el público, exhibiendo incluso una estética distinta a su época junto a la ex voz Alice Glass.
En “Baptism”, del álbum (II), y “Crimewave”, perteneciente al disco Crystal Castles (I), se sintió el momento de mayor entusiasmo en la pista de baile, la cual ya se encontraba repleta. Los fans subían al escenario, besaban a la nueva integrante y eran inmediatamente bajados por los guardias. Ethan Kath, la otra personalidad de la agrupación, improvisaba junto a Frances en los sintetizadores, mientras que Christopher Chartrand, baterista, se tomaba un pequeño receso.
Con “Concrete” y “Fleece”, material nuevo de la banda, consiguieron lograr una atmósfera que atrapó, a través de fuertes ritmos, un ambiente oscuro y potente, a los asistentes.
Finalizando lo que sería un enérgico concierto, “Not in Love”, cover de la banda Platinum Blonde y lanzada junto a Robert Smith, lider de The Cure, fue la canción que conmemoró y dio broche de oro a una gran experiencia para lo fans del dúo. Pero la fiesta no terminó ahí, ya que Omar Souleyman sería el encargado de cerrar la noche en Club Fauna…pero esa ya es otra historia.
Fotos por: Pedro Mora para HumoNegro (Gracias, cabros)
