Paradójicamente, el estreno de “El día Libre de Pólux” ocurrió en el día más ajetreado posible para María José Ayarza. Aquel 31 de marzo se encontraba sin billetera, con la Bip justa para viajar hasta el GAM y volver, y sin cargador para su celular que ya estaba en los últimos porcentajes de batería.
Sin embargo, aquellas barreras no diezmaron los ánimos de la compositora, quien durante esa misma semana realizó un listening party de su primer disco bajo la nomenclatura de Chini.png, tras su EP Ctrl + Z (2020). Un evento al que concurrió más gente de la que esperaba. Las expectativas por escuchar el trabajo de doce canciones eran altas.
Diferentes elementos componen “El Día Libre de Polux”, partiendo por su nombre, haciendo referencia a Pólux y Castor, hermanos de Géminis que intercambian lugares en el cielo y el infierno. “Siento mucho esta dualidad en el disco, sobre todo en mi manera de apreciarlo. Hubo muchas veces en que odiaba mis canciones y después sentía que habían aciertos”, señala.
Otro aspecto llamativo es la portada del álbum, obra del artista Rafael Yaluff. En ella se observa a un jardinero en tonos grises cuidando atormentado sus tulipanes, mientras al fondo un niño riega bajo el cuidado de sus padres. “Lo veo mucho como esa inculcación que hay en la familia al trabajo. De muy chica aprendí ese rigor, para lograr las cosas que quiero. Pero a veces unx no sabe descansar, solo sabe sentirse insuficiente y en la música son necesarios los tiempos de ocio para escribir y decantar”, comenta Chini.
La trampa de descansar trabajando es una de las máximas del disco, junto con el rescate de antiguas composiciones “de una época en que no las había puesto en valor” como “Tonto” y “Yo misma”.
Te invitamos a escuchar “El Día Libre de Polux”, el primer disco de Chini.png, mientras lees este XTrack.
Nanai
Es de mis canciones favoritas, partió como una mini intro que alargué, como una extraña invitación para quien quiera entrar en este disco. Está dividida en tres partes. La primera la hice con un programa de loops y sintetizadores que fueron pasando por mi casa de casualidad. La segunda parte, donde entra la letra, con batería (Pepe Mazurett), guitarra (Juan Desordenado) y con Martín Pérez Roa tocando bajo. El final está hecho con otra máquina de loops y tecladitos. Me gusta que tenga un ritmo extraño y nos cueste tanto tocarla en vivo
La letra tiene que ver con sentirse vacío. Es de un momento en que me quedé con una sensación de que di todo lo que tenía y hubo una fractura en todas mis relaciones al mismo tiempo. A veces pasa que eres el común denominador de los problemas, y tienes que revisarte. Desde un momento de vacío total lograr un espacio de pequeña celebración por existir y crear algo. Una especie de “mereces lo que sueñas” minus el chulerío. La cerré en pandemia, entonces se unen esos dos momentos de aislamiento.
Veneno
La grabamos en vivo como banda. Mediante muchas metáforas, es ir hablando de los venenos que hay en las relaciones y lo complicadas que son las personas. Hago una comparación entre lo fácil que es relacionarse con plantas versus personas: “Amo las plantas porque me dejan cuidarlas sin miedo, con las uñas clavadas en tierra lavo cada raíz podrida”, es como decir: ¡déjame cuidarte!.
En un momento como que ya es más directa y dice: “te prometí tonta mi amor eterno, pero a esta edad eso no vale nada, vine a mi monte tantas veces justo en el centro de esa muralla”, y tiene que ver con estar en una edad en que como que ya no llegó el amor de tu vida, sino que hay amores que van y vienen. El amor más importante eres tú contigo mismx, pero hay una soledad que conlleva saber que no se puede llenar vacíos propios o dudas existenciales con personas.
También habla sobre escorpiones. “Pequeñas bestias toman el sol recargando venenos, por eso dicen que al Ecuador ir a pata al sendero es una dulce sentencia de muerte”, porque mientras más uno se acerca al trópico, más venenosos, coloridos y atractivos son los bichos. Tiene que ver con que muchas veces somos más irrespetuosos con quienes más queremos. Nos importa alguien, las pasiones se desatan y pueden nacer las toxicidades.
No midas las palabras!
Más política. Mezcla lo relacional pero extrapolado a “no puedo llegar y estar, aunque sea algo casual, con alguien sin saber primero cómo piensa”. También habla de finalización, de empezar solo de nuevo: “cuando el fuego avisa, ya es muy tarde al cortallamas, no me hago un nido desde que quemé la última rama”.
Al final tiene esta coda que la inventé en pandemia: “Acopla cabida descansa, para avanza, para avanza”, es como darse ánimo y hay muchas cosas en el disco que tienen que ver con el propio oficio de hacer música y de querer rendirse, pero después retomar. Hay hartas canciones que, si bien son desde lugares oscuros, terminan siendo motores para mí.
Cinta Blanca
Ahí aparece Lele (Gabriel Holzapfel) en un audio. Me gusta una frase en particular, ya que aún siendo que somos muy amigos me pregunta “¿quién eres?”.
La canción parte diciendo “todas las palabras que mereces, todo lo que no supiste si quedara algo bueno para decirte”. Es como estar en un término, como medio picado pero también admitiendo tener ganas de seguir diciendo cosas, pero no hay nada que no se haya dicho ya.
Hay una parte que habla sobre no sentirse aceptado en la dimensión más honda, en mi caso mi masculinidad: “Ahora hablo yo, el niño triste. Nunca quisiste saber de mí, dices que ya todo viste y me guardaste bajo de mí”, y luego sobre la testarudez: “con todo el amor que mereces, tu cabeza es como quebrar tablas para un cinta blanca”. Son estas dos partes que no se conocen entre sí, esa donde está todo mal, y otra donde está todo bien, y una olvida a la otra para que exista la relación.
Al final del quiebre viene esta parte final de la canción, sobre los reencuentros que hacen que estas relaciones sean tan cíclicas. Por eso dice: “mi palabra favorita es esa misma”. Es ese momento de sincronía, que no tienes con nadie más y terminas volviendo a esa persona.
También tiene que ver con la película de Haneke (“La Cinta Blanca”), sobre estos niños alemanes van mostrando actitudes que tienen mucho que ver con cómo nace el nazismo en Alemania a partir de la presión que reciben del mundo adulto. Ahí te la dejo.
Laurel
Me hago pico cuando la toco (risas), quizás dura demasiado. Tiene que ver con esta lucha interna, en cómo uno es percibido hacia afuera, las veces que me he sentido utilizada, para comunicar algo que no es lo que realmente me representa. Se relaciona con el ser mujer dentro de la música, que vivo mi activismo todo lo que puedo, y aún así siento que es insuficiente. Y por otro lado hay quienes no les importa para nada y lo utilizan para fines capitalistas.
“Yo tenía una corona de laurel y me tenían prensándola después, por cianuro para blanquear la piel”. El laurel tiene bajas concentraciones de cianuro, si juntas mucho podrías hipotéticamente prensar veneno. Lo asocio a dos cosas: una al simbolismo de los laureles como elogio. Pero, ¿de quién? Muchos elogios pueden desviarte del camino de las razones políticas que uno tiene que hacer arte. Y otra a los maquillajes de las mujeres de la antiguedad, los polvos blancos para la cara y los carmines para los labios, ideales de belleza que se perpetúan y que daban muerte a las mujeres, por la concentración de cadmio y de mercurio que tenían para obtener su color.
Entremedio cuento cómo es ser siempre telonera de puras bandas de hombres. Una parte dice: “me ponían abriendo al que más por tres notas tocar, aire puro salió para no volver, te haces el rudo porque no cantas bien”. Muchas veces tenía sensaciones en que entregaba algo desde lo más profundo de mí, y que siento que lo gasté, pero sentí que no fue tan valorado. Es medio vístima, pero está bien.
Yo Misma
Es la más antigua la más sureña, la bautizamos chilote-shoegaze. Me gusta porque en la letra reconozco mi error, y creo que es importante hacerlo a la hora de escribir.
“Casi le digo que sí a un amor normal, pero siempre elijo el rencor, yo misma elijo así”. Nadie me puso una pistola en la cabeza para ser una persona rencorosa. Es bien sencilla y tiene que ver con admitir que uno es el problema y no se está dejando querer.
Esa canción ya existía en Soundcloud, subimos una maqueta y fue bacán rescatarla. Me acompañó la Alfilera en los cellos, y Macarena Galaz en bombo y voces. Además, Simón Campusano me grabó guitarras adicionales que le tararié.
Loop
La inventé hace unos tres años, y jugué mucho con intercambiar secciones de toda la maqueta, hasta que me gustó cómo quedó la estructura. Es una canción, al igual que “Yo Misma”, que trabajamos con Arturo Zegers en Molco, y siento que se les nota lo suereño.
Grabó baterías Pepe Mazurett, aprovechamos de hacerlo en una clase de grabación de baterías que impartió Arturo y tiene una base de secuenciadores que trabajamos en conjunto. Me gusta porque es la única canción que he hecho bajo los efectos de alguna sustancia. En general soy bastante sobria, pero aquí estaba muy fuera de mí, creo que se nota en el bpm rápido, y de hecho el puente que parte el disco entre la canción 6 y la 7 era mi consuelo durante una pálida, el bpm más lento de todo el disco, creo que fue en ese mismo viaje.
La letra es bien corriente de la consciencia con cosas disparatadas que ví al mismo tiempo y que me dieron risa. En un momento digo “es graciosa la guagua volando deforme en el sticker del airbag”, y “Otro hombre me escucha más atentamente, su polera dice ‘get to the point’”. Todas esas cosas las fui anotando.
También tiene que ver un poco con las relaciones:“Eres tan hermoso (por dentro), tú crees que una vez estos mierdas me leyeron poemas”, como hablando de alguien superior. Al final digo “pongo en un loop el loopde tu pelo, el coro de tu risa, el coro de tus ojos ¿queda el sustito o solo era miedoso”, y ahí como uno se pregunta si le gusta lo suficiente una persona y vale la pena jugársela o no.
Árboles y pasarelas
A mis compañerxs les gusta tocar esta en vivo, fue bacán que la valoraran y por eso la convertimos en single. Se trata de salir a pasear y jugar con el eco de un puente industrial. Va describiendo todas las cosas que ve y tiene esta cosa bien vulnerable de atreverse a hacer algo con alguien que te gusta donde muestras cierta vulnerabilidad. Es como un show de talentos inventado.
“Este puente es desmedido, hasta para el hombre, este puente es desmedido, hasta para Dios, este puente es desmedido, no me den el nombre”. Sé que queda cerca de Valdivia y no lo volví a encontrar. Es desmedido el puente tanto a escala arquitectónica como el vínculo que hay entre las dos personas que lo investigan.
Sofía
Es una de las letras que más me gustan del disco, la grabamos con Arturo Zegers y parte hablando del hecho de ser una canción acústica. “Esta ira extrema por ruidos brillantes, mil luces por parlante me ordenan la visión”, que se refiere a tocar con banda y electrificada. “Pero erosionan mi mente hasta disfrazarla de normal y así hasta que un día me muera, con ella esta canción para poder dormir”. Admitir que hay una música más oscura y extraña, solitaria, acústica, que a veces siento que me lleva al fondo, y que debo cuidarme de eso.
Ejemplifica la búsqueda de un algo a través de la filosofía. Antes encontraba muy chulo lo de “la música salvó mi vida”, pero creo que esta canción lo ilustra. Si el estar inspirado fuera como una especie de ánima que pasa por uno. Obsesionarse con algo o alguien que tal vez no existe, o a quien unx idealiza más bien, y abierto a la interpretación si Sofía existe o no, aunque obvio que sí (risas).
El videoclip muestra al cazador tratando de grabar un fantasma a través del sonido, y lo hicimos con dos procesos distintos. Felipe Baeza es un artista que trabaja de manera casera con cronofotografía, la técnica que se usó para Matrix que son varias cámaras que toman una foto al mismo tiempo y luego se creen fotogramas para que se vea en cámara mega lenta.
Trabajé también Valentina Morales (@duerme_volantina), una artista visual que actuó como Sofía y yo como el cazador. Ella me ha ayudado muchas veces artísticamente. La otra parte del video la grabé con la directora Luz Sierra (@lusandrea) con quien grabamos la parte en que estoy sola en el cerro buscando. Se da esta dualidad de cazador buscando en un lugar real, donde cada vez que aparece Sofía no hay nada. No queda claro si está sufriendo un ataque o en realidad está sucediendo lo que ve. Muchas cosas pasan solo dentro de unx y el resto jamás se entera.
TONTO
Parte con un loop de guitarra bien antiguo, que se va saturando y aparece Lele pidiendo ayuda. Es gracioso pero medio cuático. Me recuerda, solo temáticamente, a “Army of Me”, de Björk, quien le escribe al hermano por encontrarlo medio inútil o poco autosuficiente.
Es una puteada de siete minutos, no tiene filtro en decir “no permitiré que me usen”. Tras esos sentimientos oscuros contra otro se llega a un momento triunfal donde se trata más sobre uno y descubrir el propio valor. Damos por sentado que la rabia es una emoción negativa, cuando también puede ser liberadora.
El coro dice “No me importa parecer tonto, los misterios no te buscan si siempre es la última vez que lo quiebras con los dedos solo por probar”. Tiene mucho que ver con sentirse ridiculizado por buscar hacer las cosas de distintos modos, en mi caso hacer música. Del error uno puede buscar soluciones creativas. Al final digo en reversa: “ahora que no estoy bailando en tu clima”, que se refiere a alguien que nunca te apoyó, o cuidó, te busca para pedirte un favor cuando ve que te va bien o estas bien.
La otra parte habla sobre la muerte y lo liberador que puede ser. Es una de las cosas más dolorosas y el coro tiene que ver con eso, de enfrentarse a lo desconocido. Cuando uno realmente está creando desde rearmarse, puedes estar en un lugar oscuro pero también encontrar algo liberador en la muerte. Si vamos a morir da lo mismo lo que hagamos, demos lo mejor que podamos y lo que haga más sentido, sin pensar en otras opiniones.
Ahí aparece la mamá de Niña Tormenta que cita lo que dijo mi abuela antes de morir. Era una persona muy progresista, siempre estuvo a favor del aborto, escuchaba a Gepe y los enanitos verdes. Dijo “no creo en la vida después de la muerte, yo creo que cuando uno se muere alguien entra a tu pieza, y te apaga la luz”. Fue importante poner ese audio en contexto con ese ruido que están armando al final. Siempre quise que este audio estuviera en ese lugar.
Punto de Vista
Con Bronko Yotte ya habíamos colaborado una vez, de hecho hay otra canción que quiero hacer con él que no he podido terminar que se llama “Medallita”. Fue el único feat propiamente tal y me gusta que él no se cierre a etiquetas y géneros, sino que vea si le gusta o no.
Fue muy elocuente en hablar de la situación social que vivimos entre el estallido y la pandemia. Cerré mi parte de la canción antes de la pandemia, él después, y creo que se cruzan bien. Yo hablo desde algo muy político, y él de algo político desde una sensación de aislamiento por las cuarentenas. Bronko también hizo gran parte de la base, partiendo desde una guitarra acústica mía.
Mi parte de la letra involucra un cruce entre la violencia policial contra su pueblo, y la violencia de los hombres contra su pareja, como una yuxtaposición. Hay una línea que escribí que habla directamente del caso de Nabila Rifo: “Velo desde el punto de vista, me dijo, y los ojos me arrancó. Me miro al espejo pero nada me vio”. Cuando escribí esas últimas dos frases logré darme cuenta tan solo un poquito de lo que significa, en estos casos, lo que es realmente perder la visión. No creo que lo vaya a entender sin vivirlo, pero escribí hasta poder darle un sentido, porque me parecía muy impresionante lo que estaba observando, tanto ese caso como después con las víctimas de trauma ocular.
Tiene esa cosa media naive. Pasa algo similar con una canción de mi primer EP (“Carlita”), que está en un tono mayor y suena súper alegre, pero si prestas atención a la letra habla de un femicidio. Es bueno hacer esos cruces, porque demuestra lo siniestro que puede ser que una persona ejerza violencia. Muchas veces las personas que rodean a unx agresorx dicen “ay, pero si conmigo ha sido un amor”. Sí, contigo pero a su pareja la trata horrible y no sabes lo que pasa entre cuatro paredes. Es una invitación a escuchar las letras pero mucho más a los testimonios.
Arranque
Es puramente erótica, estar medio drogrado de amor y me gusta que el disco cierre de forma más suave y tierna. Tiene este juego que me gusta, de que en la métrica habían dos palabras que no me cabían y las mezclé en una sola. “Es la íntima de gentemperamental, para dormir sus iniciales al dia”, y“ti-bia novedad, ¿dónde va primero? Va durmiendo un tierno arranque de mi margen hacia ti-bia novedad”. Es una reconciliación y despedida al mismo tiempo, de irse sin nada pendiente. No beef.
