Ases Falsos repasa “Mala Fama” canción por canción

Cristóbal Briceño, vocalista y compositor de Ases Falsos, comentó minuciosamente las trece canciones de “Mala Fama” con La Rata.

Sentado en el living de su casa, en Limache, admite que está satisfecho con el resultado del cuarto larga duración de la banda. “Ya puedo terminar mi relación con el disco en paz. Es divertido, cuando yo termino ahora recién empieza con los demás, con el público”, explica mirando el CD editado sin fondos gubernamentales ni el respaldo de un sello detrás.

“Una de las cosas que nos vamos a jactar en esta etapa de difusión de prensa es que el disco no tiene ningún “plug-in”, todo los efectos son reales”, adelanta antes de adentrarse técnicamente en un trabajo grabado casi íntegramente a las orillas del Lago Llanquihue. 

Recomendamos leer la siguiente entrevista escuchando “Mala Fama”, que ya está disponible en el sitio oficial de Ases Falsos y prontamente en plataformas de streaming.


Así es cómo termina

Creo que es un buen comienzo. Es una composición ambiciosa, tiene un final a lo Marvin Gaye, con instrumentos nobles como flauta traversa tocada por Hermes Villalobos de Inti-Illimani Histórico. Nos fuimos encontrando con él en los últimos meses y yo pensé que estaba como “sobre calificado” para tocar con nosotros pero lo vamos a integrar este año y veremos qué pasa.

La letra la hice cuando se había quemado el pueblo de Santa Olga. Ese es el punto de partida: una niña viendo a su pueblo consumirse. Me gusta que abra el disco porque habla sobre el final, entonces es como una canción premonitoria, un pop nostradamico. El tema profetiza el final de los tiempos como un gran incendio, una gran bola que se quema. El planeta tierra va a sobrevivir a eso -como ha sobrevivido a la era del hielo-, nosotros somos los que vamos a partir. Y creo que es una bendición para el ecosistema.

El viento soplará

Es un tema antiguo y tiene que ver con, es feo decirlo, la resiliencia. Es fácil deprimirse en la era de la retroalimentación virtual. Yo me pregunto, ¿Cuánto hubiera durado vivo Kurt Cobain con Twitter? No creo que hubiesen llegado al “Nevermind”. Lo veo en mis colegas, ¿Cuántas bandas se deshacen desgastadas por el simple uso de las redes sociales?

Se trata de confiar en que el tiempo ponga las cosas en su lugar. Me sirvió a mí, y esperemos que le sirva a otra gente en sus respectivas circunstancias. Fue la canción que salió más fácil, la primera que tocamos en vivo de este disco y la primera que grabamos.

Qué hará de mí

Fue el primer adelanto, es un tema bastante directo y tiene una particularidad en la grabación: justo antes del solo la batería se dobla y se forman dos sets de batería, tocadas por Daniel de la Fuente y en las que hace los mismos movimientos. Suena raro, le da una especie de delay que se mantiene hasta el final del tema. Lograr el sonido del solo  fue un chiripazo pero que bueno haber rozado esa “grandeza”, con una progresión armónica interesante.

Todo el disco está bien filtrado por mis últimas y amargas experiencias con el mundo virtual. Es un poco inevitable hacerse cargo de tu vida. Hay bandas que lo logran, que uno escucha sus discos y es como si no les hubiese pasado nada en la vida.

Lucha Causa Problema

De repente hay gente que me dice que le hago canciones a Camila Vallejo, a Bachelet, a Mayol. No conozco a ninguna de esas personas, no podría hacer canciones sobre ellos. Este disco tiene canciones sobre personas, pero no son personajes públicos.

Va dirigido a la época, al sentido común. Espero que sea un aporte para todas las causas reivindicativas con las que yo estoy de acuerdo. Las mismas tomas feministas, sus petitorios, encuentro que tienen mucho sentido. Estoy de acuerdo y me gustaría considerarme un aliado, pero no como parte, no desde dentro, si no que desde afuera para tratar de aportar con cuestionamientos que mantengan la mente en movimiento. Aunque esa es pura pretensión, al final me sigo considerando un mero entretenedor.

A mí las canciones me ayudan a decir las cosas en voz alta. Le pasa a algunas personas que por no decir las cosas se transforman en tremendas trancas, fantasmas, solamente por no sacarlas de adentro suyo.

Las canciones tristes o melancólicas están hechas como un receptáculo de tu pena. Tú se la entregas y después cargan gran parte del peso por ti. Un disco depresivo no siempre expresa a un compositor depresivo. También puede ser al contrario. Las canciones te ayudan a cargar la cruz.

“Lucha Causa Problema” tiene 70 pistas y yo logro escuchar 65, eso me hace sentir orgulloso. En “El Paisaje Salvaje” de los Fother Muckers nos pasó que grabamos muchas capas y después se escuchaba una masa. Igual se siente, es rico, pero es esa fantasía que tiene uno después de escuchar el “Pet Sound”. Ese disco es como llegar a la luna, es una proeza técnica increíble. Que en una grabación MONO uno pueda identificar todos los timbres diferentes. Tiene que ver con la nobleza con el que está grabado.



Jhendelyn

Me gusta verlo como un tema medio Duran Duran, como de comienzo de los noventas, pero con teclados al estilo “Save a Prayer”. Martin grabó el riff desde Santiago y la mandó por Wetransfer, debe ser el archivo de audio menos noble del disco pero funciona.

La letra está construida, obviamente, alrededor de Jhendelyn Núñez. Está dedicada a ese tipo de mujeres, de las cuales soy un admirador. Uno siempre termina fantaseando: “yo podría hacer feliz a esa mujer, ella no sabe, pero yo podría hacerla feliz”.  Ellas transmiten mucha tristeza, la presión de mantener su apariencia física, que sea “comercialmente viable”. No sé, me parece un tipo de mujer muy interesante. Era justo hacer una canción sobre ellas.

Nace un contragolpe

Fue el segundo adelanto. Está muy bien logrado, la banda hizo real mi visión. Hay veces que las versiones finales terminan siendo algo totalmente diferente a lo que uno quería en el comienzo. A veces eso es bueno, pero acá se materializó todo lo que yo quería.

Es la letra más críptica, son las que más me entretienen escribir porque están llenas de símbolos que son un juego. Me dan risa las interpretaciones que le da la gente porque lo hacen desde su proximidad. Es difícil porque tenemos una crisis de cultura grave, porque la gente consume lo que le da el periodismo día a día, solo basura.

Tiene hartas referencias entretenidas, que no me gustaría revelarlas pero te puedo decir una que es imposible de descifrar, por lo caprichoso.

Cuando dice “iba cuando escuché la voz de un locutor radial cantarme la cruda verdad”, ese locutor radial era Julian García Reyes (padre), director de la antigua Radio Oasis. De esa radio aprendí muchísimo, era increíble, una de mis escuelas musicales.

Entonces, de repente, él intervenía para leer alguna cita sin adjudicar, era muy agradable. Una vez escuché una que me golpeó en ese momento, era: “Siembra un pensamiento y recogerás una acción, siembra una acción y cosecharás un habito, cultiva un habito y obtendrás un carácter, cultiva un carácter y cosecharás tu propio destino”.

Ahora leo la frase y no me hace mucho sentido, pero hace 12 años, como un joven perdido y melancólico me estimuló mucho.

Películas

Esta la hice en la calle, en el trayecto entre la sala de ensayo y la casa de Hugo San Juan (Las Chaquetas Amarillas). Llegué, tomé la guitarra, y grabé un demo ahí mismo.

La canción tiene un mensaje muy explícito, muy claro y ya está. Ya lo hice.  

Lo que me da lata, es que después esos mensajes tienes que repetirlos tanto que después parece ser un eje programático dentro de tu vida y no es así. Es algo que uno quiso decir en un momento y después tiene que repetir como loro. Son impulsos que después se transforman en eslóganes y yo quiero todo lo contrario. Por lo mismo uno tiene que seguir haciendo temas.



Mi Tribu

Le quitamos el fogateo y le dimos un sentido más “pianístico”.  Grabamos con un piano de cola desafinado que estaba en el estudio y tuvimos que afinar todos los instrumentos al piano. El “flaco” (Francisco Rojas) le puso varias capas sonoras, la batería está tocada con bordona y una reverb gigantesca que funciona super bien por sugerencia de Alejandro Soto.  Me siento orgulloso.

Si bien el tema es super ideológico, lo que lo hará caduco, se puede sobrellevar porque es desconfiada, no es de querer convencer. Aunque fue la única canción con la que tuve problemas con el grupo por la letra. Al “flaco” le complica la letra. Eso me gusta porque nunca me comentan las letras, nunca, como  si no les importara. En el fondo si les debe importar, pero no conversamos de eso.

Le explicaba que la canción no se trata de “frenar” las funas. No sé, si en tu barrio vive en un torturador, dale, vamos a funarlo, pero no esperemos que con eso los niños se vayan a educar. Le haremos pasar un mal rato, pero no vamos a educar a nadie con ese acto, porque lo único que los niños reciben es el miedo a ser funado.

Hay otros casos más sutiles donde la gente se “corta” y deja de pensar sólo por miedo a que después te la cobren. Como siempre hay una invitación a pensar las cosas varias veces y actuar sin miedo a las consecuencias. Tratar hacer las cosas por amor y no por miedo.  

La Casa

Esta canción tiene algo que Alejandro detestó. Le pedí que dejáramos la batería saturada, iba contra todos sus principios, la odiaba. Me traspasó ese odio. Es la canción a la que le tengo menos cariño pero en un momento me gustó.

La letra corresponde a cosas más íntimas de las cual no quisiera explayarme pero creo que el mensaje es claro. Es difícil escapar de nuestras creaciones, de nuestros entornos, cuando nosotros mismos los creamos. De las decisiones que se toman de adulto es difícil de escapar, hay que cargar con ellas.  

Siempre nueva

Tiene que ver con una chiquilla que siempre veía, después me la volvía a encontrar y no la reconocía. Era muy raro lo que me pasaba con ella, y se lo comenté: “Siempre que te veo me pareces nueva”. Me pareció una linda imagen sobre la cual desarrollar una canción pop. Trata sobre la libido, la falta de real identidad. Me parece real que no sea real.

Es una canción que va mutando. Hice cantar harto a Simón, que tuvo un segundo aire en este disco y volvió a la carga en la primera línea de la banda, aunque por algo somos un equipo. Es bueno que haya una rotación de responsabilidades.

Hay gente que me dice: “Tú… tú eres como un cantante de antes”. Lo que pasa es que yo trato de cantar lo mejor posible. Yo creo que ahora a los muchachos les da vergüenza cantar bien, pudor de cantar afinados.



88

Para mí, esta es una precuela de “2022”. Se trata de una sobre un momento en particular, que es cuando se termina el carrete, se empieza a hacer de día y hay que devolverse a la casa. Es muy explícita la canción, 88 porque está ocurriendo en 1988 en un país represivo pero todos sabían que ya se venía. No tuve que hacer mucha documentación para suponerlo. Me imagino particularmente ese sector de Sierra Bella, Carlos Valdovinos, por ahí.

Termina un carrete, la chica que dice que se va y el personaje aprovecha de irse con ella. Es algo que uno hacía mucho antes. Esa caminata borrachos, pero no tanto, empezando a recobrar el sentido con la primera luz del sol. Las cosas que pasan en la madrugada. En un momento hay un quiebre, canto “un perro metió el hocico” en vez de ahondar en la relación. Son esos pequeños detalles que no están registrados pero que nos unen como personas, cosas nimias que nos mantienen cohesionados.

Es un amor post adolescente muy similar al de “2022”, pero quizás es un poco menos esperanzadora que la otra.

Nada me debo

Es uno de esos temas que he cargado muchos años y que por fin pude soltar. Lo hice después de una entrevista que me hizo Lucho Hernández, que me parece un hermoso hombre. Él me contó, que a él le había contado Zalo Reyes,  que trataba de imitar o combinar a Leo Dan con Roberto Carlos. Me llamó la atención, así que quise hacer una canción con esa mezcla. Partí esa misma noche a hacerla.

“Nada me debo” tuvo muchas vidas. Tiene una cronología super rara. La hice primero para Zalo Reyes, nos íbamos a juntar, pero él tuvo una recaída de salud y no ocurrió.  Luego pensé en Cecilia, pero ahí no llegué a nada. Después la mandé al Festival de Viña y no me pescaron. Tenía muchas ganas de participar en el festival como un regalo en vida para mis abuelas.

Al final quedó en este disco y es la canción que más se sale del estilo pero ya encontró su nicho y así quedará.

Aunque ya no la entiendo mucho, sé que la vamos a tocar en vivo y va a golpear.

Mala Fama 

Es el primer single y a mi me cuesta ver otro single en este disco. Es una buena colección de canciones pero uno sabe poco de lo que le interesa a la gente. Al final, los singles deberían ser las canciones que le gustan al público.

Yo no hago música como en una burbuja o queriendo ser retro. Esta es la música que nos gusta, no es que nos resistamos a ser populares.

Es una de los mejores logradas. Martín ocupó una guitarra Squier Stratocaster, que ocupa cuando se abre la canción y aparece la banda. El solo de saxofón es de Claudio Rubio, su solo es conmovedor, empieza a tocar y ya me siento Billy Joel.

Esta es una canción doble, dos canciones en una. Es una idea antigua que tengo de música progresiva, realmente progresiva, que avance y que no vuelva. Las dos partes son muy diferentes, pero están ligadas con la suficiente delicadeza para que pase de “una puerta a otra” sin salto.  Eso lo enfatizamos en el videoclip.

El cambio en el tema viene de una idea antigua, desde el primer disco de Fother Muckers “No soy Uno”. Las cosas no son lo que aparentan ser, hay infinitas posibilidades.

La letra en su primera parte es muy resuelta, muy segura, tiene todo un sistema filosófico pero la vida nos demuestra que las cosas nunca son como debieran ser. Entonces la segunda parte es muy vulnerable. Las letras de Ases Falsos generalmente son puertas afuera y mis discos solistas son lo de adentro. Es lindo que en este tema termine puertas adentro y con los cuestionamientos de almohada que todos padecemos, con una multitud de voces.



El lanzamiento de “Mala Fama” será el domingo 24 de junio en el Teatro Biobío en Concepción. Encuentra más detalles en el link.

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