Fotografías por Jacqueline Riveros / @j.riverosph
Día de misa. Como en aquellas noches en que Morrissey y Madonna son celebrados por cientos de fanáticos en emocionantes fiestas en la Blondie, esta noche la figura de Brian Molko volvió a ser enaltecida en suelo chileno por nuevos y viejos fieles, que desde temprano se agolparon en las puertas del Movistar Arena para el esperado reencuentro con Placebo después de una década.
De entrada, la situación sería distinta y especial. Por las pantallas se pudo ver un mensaje que recordaba a los asistentes la petición del grupo de evitar registrar el show con el celular y vivir la experiencia completa, con sus propios ojos, destacando que la intención de los británicos es “crear comunión y trascendencia”. Algo que se cumplió, casi por completo.
Lo de este miércoles 21 de marzo fue algo inolvidable. La entrega de Olsdal, Molko y compañía es total, con una potente performance amplificada hasta el mínimo detalle, con un sonido que rozó la perfección y una banda ajustadísima, ampliada en seis integrantes, destacando la participación de la teclista y violinista Angela Chan. Asimismo, la mayoría tomó letra de la exigencia inicial y evitó subir sus manos para grabar, lo que hizo posible disfrutar plenamente el concierto. Sin interrupciones, como disfrutar un disco en formato físico.
Con su habitual estética glitch en las pantallas, los ingleses se tomaron pocos minutos para hablar con sus fans. “Aquí estamos, estamos muy felices. Tenemos miedo, tenemos hambre”, fueron algunas de las pocas palabras que Molko dirigió al público, quien al ver el Movistar colmado, afirmó que casi “todo Santiago está aquí”. Tras esto, el líder no dejó nunca de cantar y sólo se salió de libreto para hacer bajar algunos celulares, especialmente a una persona con sombrero que sacó de sus casillas al vocalista.
Desde el primer tema, el show fue de menos a más. Gran parte de los asistentes, ya advertidos de la falta de hits en su setlist, supo apreciar los temas de Never Let Me Go (2022), un disco que, si bien, aportó luminosidad al repertorio del grupo, palicede frente a la fuerza y emotividad de sus trabajos más emblemáticos, algo que quedó claro con “Bionic”, un frenético corte de su álbum debut que encendió a los más fanáticos.
Aunque el sentido de comunión se logró, con molkitas y molkitos reunidos otra vez en torno a su banda favorita, el carácter íntimo y especial del show parecía más apropiado para un lugar como el Teatro Caupolicán. Asimismo, que más de la mitad del repertorio se concentre en los temas de los últimos dos álbumes, aletargó a ratos una jornada que pudo ser más especial. Una situación parecida a lo que se vivió en el ultimo paso de The Cure por Chile, donde los temas inéditos desconcertaron a algunos. Sin embargo, esa vez Smith y los suyos cumplieron con sus hits eternos.
Más allá de los reclamos, la gran fanaticada de Placebo en Chile vivió el ansiado reencuentro con total emoción y muchos pudieron verlos por primera vez, con el regalo de disfrutar “Taste In Men” –uno de los mejores singles del grupo y que desempolvaron para su gira de este año-, y la mejor experiencia para un concierto: sin problemas de sonido, ni cancha VIP, ni molestos celulares. Solo faltó más karaoke.
Placebo
Movistar Arena, 20 de marzo de 2024
- Forever Chemicals
- Beautiful James
- Scene of the Crime
- Hugz
- Happy Birthday in the Sky
- Bionic
- Twin Demons
- Surrounded by Spies
- Soulmates
- Sad White Reggae
- Try Better Next Time
- Too Many Friends
- Went Missing
- Exit Wounds
- For What It’s Worth
- Slave to the Wage
- Song to Say Goodbye
- The Bitter End
- Infra-red
Bis:
20. Taste In Men
21. Fix Yourself
22. Running Up That Hill (A Deal With God)
