Hace 17 años nos dejó de este “mundo material” George Harrison, el icónico guitarrista de The Beatles. El oriundo de Liverpool, reconocido seguidor de Krishna, dejó un legado incalculable para los fanáticos de la música pop, además de entregar preciosos mensajes en cada una de sus canciones. Fue el Beatle que más se acercó a la espiritualidad.
Sólo ocho semanas antes de su fallecimiento víctima de un cáncer, el 29 de noviembre de 2001, el guitarrista registró la última canción de su vida “Horse to the Water“, incluida en un disco del pianista y showman inglés Jools Holland (“Small world, big band”) que incluyó, además, la participación de otros grandes como Eric Clapton, Sting y David Gilmour. El trabajo completo lo puedes escuchar acá.
El tema fue co-escrito con su hijo Dhani y el proceso de grabación no fue nada de fácil para un Harrison que ya se notaba débil y alicaído. Este sería el último viaje de su vida. El lugar escogido: Suiza. Aunque por falta de fuerzas las seis cuerdas están a cargo de su hijo, George igual hizo un esfuerzo y grabó la pista de voz del tema que luego Holland rescató y le puso de su parte. El resultado sería una hermosa canción blusera que pone en el centro cada una de las palabras pronunciadas por su compositor.
Como dato extra, Harrison acreditó el tema a “RIP Music Ltd” una sarcástica referencia a la situación que atravesaba por ese entonces. Por eso te queremos George, por eso aún nos duele que ya no estés…
