LOLLAPALOOZA 2019 – Cap.1: Shock
La tarde del domingo 31 de marzo de 2019, gran parte del público dentro del Parque O’Higgins no se concentró en los escenarios principales de Lollapalooza, sino en el Acer Stage.
Miles de personas comenzaron a corear “Pienso en tu Mirá”, junto a Rosalía que lucía emocionada con su debut en Chile. Emoción que demostró con mayor fuerza en “Catalina”, de su disco debut “Los Ángeles”. Sin highlighter, Rosalía brilló.
Pero más allá de los canciones, quedó la sensación de que la catalana arrasó, superando toda expectativa. Los medios destacaron su presentación como uno de los puntos altos del festival, y muchos asistentes pudieron compartir con ella, varios se tomaron fotos con la española antes y después de su presentación. Un primer capítulo intenso.
APROXIMACIÓN A RITMOS URBANOS Y LATINOS – Cap.2: Búsqueda
Durante 2019, Rosalía comenzó a experimentar con nuevos sonidos, vinculándose con artistas urbanos latinos. “Con Altura” junto a J Balvin, “Yo x Ti, Tu x Mi” junto a Ozuna, fueron las canciones que comenzaron a romper las barreras de la catalana. En 2020 sorprendió con una colaboración junto a Travis Scott (“TKN”), desató suspiros junto a Bad Bunny en “La Noche de Anoche”, y anteriormente había lanzado singles entre los que destacan “Aute Cuture”, “A Palé” y “Juro Que”.
Corría marzo de 2020 y la española se encontraba en Estados Unidos trabajando en su siguiente disco, entre estudios de Miami, New York y Los Angeles. A su lado habían productores de renombre como Pharrell Williams y Noah Goldstein. De repente, comenzaron a tomarse medidas de encierro por la pandemia y Rosalía decidió quedarse en Norteamérica, extrañando a su familia.
Cuidadosa de cada detalle, declaró para Rolling Stone “como artista, mi mayor deseo es ser lo más libre posible”. Mientras trabajaba, pensó en el nombre de su tercer disco: tributando a su madre, que trabajaba en una empresa metalúrgica y viajaba en moto. Esto es Motomami, una mezcla entre todos los estilos que nutren su carrera artística, y la constante influencia de la familia y sus propias vivencias.
MOTOMAMI – Cap. 3: Identidad
“Una forma de vestir, un grafito, un estilo de vida: este 2022, se quiera o no, se lo lleva Rosalía. Con un disco dinámico y efervescente, la cantante española nos la bienvenida a su Motomami era, una que no reniega de sus raíces flamencas, pero que absorbe ritmos y, sobre todo, se transforma”.
Así definió Catalina García el último disco de Rosalía en nuestro recuento anual. Un álbum que no teme mezclar el beat reggaetonero con un jam jazzero en “SAOKO”, o que interpreta con tierna intimidad los deseos carnales en “HENTAI”, o que vuelve didáctico y lleno de referencias el repaso al abecedario en “Abcdefg”.
Si bien en la antesala de sus lanzamientos, muchas personas en redes sociales criticaron el nuevo paso de la española tras escuchar “CHICKEN TERIYAKI”, considerando que había bajado varios peldaños de “El Mal Querer”, el 18 de marzo las opiniones comenzaron a cambiar.
SEGUNDO SHOW EN CHILE – Cap.4: Consagración
El 18 de abril se confirmaba que Rosalía aterrizaría por segunda vez en Chile en el marco del “Motomami world tour”. Esta vez sería el Movistar Arena el punto de encuentro agendado para el 28 de agosto.
Dos días después se liberaron las primeras entradas y en menos de una semana el show se agotó. Una expectativa que se cumplió aquella noche de domingo. Con un escenario que solo necesitó a ella y sus bailarines, y desplegando más de treinta canciones de su colorida discografía, la Motomami se consagró en el mismo parque que la acogió por primera vez en Chile.
Coreografías a tiempo, un pasillo para acercarse un poco más a sus fans y crear momentos para subir a TikTok, y miles de cámaras armaron una experiencia distinta a la que había ocurrido hace tres años. Distinta, pero transmitiendo las mismas sensaciones entre el público.
PREMIOS Y LOLLAPALOOZA 2023 – Cap.5: Senda
Sorpresa causó el nombre de Rosalía como una de las headliners de Lollapalooza 2023. Primero, porque no aparecía dentro de los rumores de varios sitios de internet sino hasta los días previos al anuncio. Segundo, porque habían pasado apenas tres meses de su visita a Latinoamérica. Sin embargo, eso no parece ser un pero.
Y para consolidar su versatilidad, Rosalía se atrevió con “LLYLM“, su primer single cantado en inglés, que además retoma las palmas y ritmos del flamenco. Meses antes se atrevió con el mambo en “Despechá“, generando expectación en redes y nuevas coreografías en TikTok.
Rosalía ya es un nombre a tener en cuenta a escala global. En enero pasado cantó en el Louvre, en la capital de la moda. Colaboró con Coca Cola para el lanzamiento de una bebida edición limitada. Hace un par de días ganó el Grammy a Mejor Álbum Rock/Alernativo latino, generando polémica donde varios usuarios de redes sociales señalaron que por ser española no debiese ser considerada latina. Mismo debate que se generó en la versión regional del mismo galardón.
Cierto o no, la emoción de la española no necesita traducciones o banderas. “Cuando lo escuché a Fito decir ‘Motomami’ (como ganador a Mejor Álbum), sentí el peso de todo lo que me costó hacer este proyecto. Me recorrió todo el cuerpo, como si la suma de los últimos tres años me hubiera tirado al suelo de un golpe y me hubiera hecho levantar y ponerme a llorar”, relata.
Luego del shock en el Parque O’Higgins el 2019, y su consagración hace algunos meses en el Movistar Arena, sería erróneo decir que la Motomami meterá tercera sobre el Parque Bicentenario de Cerrillos. El próximo 19 de marzo, cuando estemos a minutos de su show, creyendo seguir el camino de Rosalía, de seguro ya habrá acelerado varios metros.
