Nadia Milton, romántica eterna: la pionera de la nueva ola chilena

Hablar de los 60’ es hablar de rock and roll. Una época donde la experimentación y la música iban de la mano.

Con el éxito del sonido de figuras como Elvis Presley o Chuck Berry, alrededor de todo el mundo se buscó replicar ese efecto que generó este estilo, masificándose en Chile con la llegada de “La Nueva Ola”, un fenómeno de artistas y músicos que exploraron las melodías del rock norteamericano y el pop europeo, formando un movimiento que se popularizó con el alero de la televisión y la radio.

Artistas como Peter Rock, Buddy Richard o Luis Dimas son reconocidos como exponentes del movimiento de la Nueva Ola en el país.

Mujeres y hombres fueron abriéndose poco a poco un espacio en la industria que los llevó a consolidarse y convertirse en parte esencial de la historia de la música chilena.

Sin embargo, mucho antes del éxito de Cecilia “La Incomparable” o el carisma de Fresia Soto, en 1960 llega a territorio nacional una mujer que experimentó en carne propia los primeros pasos de la escena musical que permitieron posteriormente el éxito y popularidad del movimiento de la “Nueva Ola” chilena.

Najda Zajc, una entusiasta joven italiana se trasladó desde Nápoles a Chile junto a su familia en los sesenta. Con una maleta llena de sueños llegó a temprana edad a nuestras tierras buscando donde descansar de la violencia en la que se vio involucrado su padre tras participar en la Segunda Guerra Mundial.

En Chile, tras recibir la nacionalización bajo el nombre Nadia Milton”, encontró un espacio donde pudo experimentar con el arte, involucrándose en diversos proyectos musicales desde la infancia.

A partir de los nueve años formó parte de un coro infantil liderado por Larry Godoy, un joven profesor oriundo de Iquique que decidió dedicarse a la música para niños con canciones como “Arroz con Leche” o “La niña María”, personificado como payaso y acompañado por pequeños que buscaban pulir su talento.

La joven de melena platinada continuó su exploración musical, colaborando desde los quince años con Peter Rock y convirtiéndose en una de las mujeres pioneras que incursionó en la industria musical chilena al ser descubierta por Camilo Fernández, el productor discográfico que impulsó la corriente de la nueva ola.  Así, Milton se convirtió en la primera mujer en grabar un disco “rock and roll” en el país.

A lo largo de su carrera musical logró captar la atención en países extranjeros, convirtiéndose en un éxito en Europa tras grabar “Un Poco” y “Scoubidou”, material que fue guiado por el músico Valentín Trujillo y que se masificó al ser presentado en el Festival de la Canción de Eurovisión en los 60’.

Nadia Milton gozaba de talento y juventud, con el tiempo fue desarrollando una potente imagen de chica vintage sensual, amante del jazz, el rock y el bossa nova. Con una excusa de mostrar su música al mundo, realizó diversas presentaciones en Perú y Argentina, armando en el país trasandino una carrera en paralelo a la establecida en Chile, adoptando como pseudónimo el nombre de su madre “Amalia”, ya que por contrato con discográficas chilenas no podía hacer uso libremente de su nombre artístico.

Tras su estadía en Argentina, Nadia Milton decidió emprender el vuelvo a México, donde consolidó su carrera llegando colaborar junto al músico y productor José José y un poco más allá de la música, armó finalmente una carrera como actriz en la tv mexicana participando en telenovelas, en más de 18 películas latinas y siendo modelo de trajes de baño en revistas, empoderándose de su imagen sin temor a los prejuicios de la época.

Nadia Milton se convirtió en un icono de la música nacional y el cine latino de la época, junto a su talento y sensualidad logró dar la vuelta al mundo, marcó parte de la escena musical chilena sin temores, solo dejándose llevar por sus propias pasiones.


https://www.youtube.com/watch?v=Jiyusm1MJks

Total
0
Shares

Comments are closed.

Previous Post

Vivir en rebeldía: 5 libros sobre mujeres al estilo punk

Next Post

Peggy Olson: la protagonista secreta de Mad Men