Eran las 7 de la tarde. El frío daba igual, porque el entusiasmo superaba todo. La Sala Master de la Radio Universidad de Chile se veía llenita. La mayoría se sentían afortunados de haber alcanzado a llegar a la sorpresiva función extra que Niños del Cerro anunció el mismo día, luego de ver la alta demanda de tickets para su show, en el que lanzaban físicamente su aplaudido álbum debut Nonato Coo.
Como suele pasar en salas de conciertos con sillas y piso flotante, las ganas de saltar y darlo todo se ven algo limitadas por el espíritu del lugar. Bastaron cinco canciones para que la audiencia se arrimara al escenario y que la Sala Master se convirtiera en el Bar 1 o el Centro Cultural Rojas Magallanes. Una explosiva presentación de hora y media que contó con temas nuevos, un cover de Talking Heads (“This must be the place” en español) y su primer disco completo. Y la energía estuvo de sobra: muchos después afirmaron que la segunda presentación estuvo mejor, empezando porque la gente se paró de sus asientos al primer tema. ¿Se habrá esparcido el rumor de que uno se podía parar?.
Ya eran las 9 de la noche. Momento de tomar un taxi, porque la noche seguía en el Cine Arte Alameda: Diego Peralta lanzaba finalmente su excelente cuarto disco “Nuevo Hogar”, una joya pop que fue presentado con un sonido impecable con una banda ajustadísima, que contaba con capos como Leo Saavedra en teclados e Ítalo Arauz (Matorral) en batería. Sin nervios al cantar, Peralta se la jugó por ser un crooner a ratos, y creó un ambiente agradable para disfrutar de principio a fin su último álbum.
En poco más de una hora, Peralta celebró su buen momento con amigos sobre el escenario, como Tomás Preuss en el tema que da título al disco, y (me llamo) Sebastián, quién hizo un gran trabajo al ponerse en el lugar de Cristóbal Briceño, responsable de las voces de “Dentro de un sueño”, apropiándosela con estilo gracias a sus ágiles recursos vocales. Como broche de oro, el público respondió muy bien y el show fue otro lleno total.
Mientras este show se llevaba a cabo, los Niños del Cerro abrían las rejas para la segunda función en la Sala Master, con una fila que colmó la sala, y Ases Falsos repletaba el Teatro Mundo Mágico en un show del que no hizo falta promoción: las entradas se habían agotado un par de días antes. Y la noche no terminaba aquí: era momento de tomar otro taxi para ir hasta Casa Matta, lugar donde se lanzó un fanzine hecho por integrantes de bandas como Paracaidistas, Urban Monk y Medio Hermano. ¿Alguna duda? Sí, estaba lleno también.
“¿De dónde sale toda esta gente?” me comentó de pasada Gonzalo García, cantante de Planeta No que al otro día estaría celebrando otro show masivo, el festival “El Rito”, organizado para celebrar los dos años del programa de Rock&Pop y RedBullRadio, Tierra Parlante, y que reflejó el buen momento de la música actual. Eso se vio de forma más reducida, pero más intensa quizás, en Casa Matta: aunque fueron muy bien recibidas las presentaciones de Valentina Novales y Lia Nadja, desde la aparición de Dadalú todo se volcó hacia la euforia: junto a sus dos músicos con máscaras de animales y una performance implacable, esta chica puso a bailar y saltar a todos al ritmo de “Internet” y “War For Terrotory”.
Poco después, Patio Solar puso las gargantas a prueba, con un set robusto en canciones de su placa Temporada. La espacio de la sala se vio peligrosamente colmado, en un caos curiosamente controlado al límite de que alguien cayera sobre los pedales de guitarra. El público estaba ansioso y la noche continuó a la misma altura con Medio Hermano, quienes estrenaron su nueva formación y un par de canciones de su primer disco, Lucha Libre, próximo a salir, y Paracaidistas, quienes descasarán por un rato de los escenarios por planes de uno de sus integrantes.
Un viernes que pareció distinto, pero que es una postal que se repite al menos 3 veces al mes, y que ha sido así hace un buen rato. La música chilena está más saludable que nunca. El frío y el smog no han detenido nada. Sólo la pasión de quiénes confían en lo que hacen, y sus múltiples expresiones (como las ferias de diseños o la creación de fanzines) hacen que todo esto sea mucho más entrañable que nunca.
Videos tomados de los canales de Cortando El Aire y Mínimo de Memoria.
