Lo del jueves fue algo alucinante. Como dicen que fue la primera vez que Tame Impala pisó suelo chileno en Peñalolén, o cuando Primal Scream debutó en la Ex Oz en 1998. Ahora en el mismo lugar donde estuvo el combo de Manchester, se vivió ese espíritu de estar en el lugar adecuado donde todo pasaba.
Pero vamos por parte: la noche ccomenzó tímidamente, con una larga fila en las afueras de este centro de calle Chucre Manzur a las 9:15 de la noche, con un par de sacudidas sonoras que vale la pena comentar. Para calentar las aguas estuvieron los Spiral Vortex, banda que empieza a meter ruido en el mapa local con un Ep que lanzaron hace poco, y una potencia en vivo innegable, aunque la voz líder del grupo sea a ratos perturbarte, entre los filtros vocales y las distorsiones eléctricas.
Pocos minutos después llegó el turno de Magaly Fields, quienes por poco se roban la película. Su performance simple y directa convirtió a los desinteresados oyentes de la barra y sectores cercanos al escenario, en nuevos fieles de su rock de espíritu punketa lleno de efectivos riffs e instantes precisos convertidos en canciones de tres minutos. “Death Is Around” y “Dos en una vez” fueron parte de los cortes que generaron mayor comunión con el público, entre los que ya habían varios que se sabían sus canciones.
(Video de Cortando el Aire / @cortandoelaire)
Finalmente, llegó el momento de Temples: la potencia equilibradamente ruidosa de su concierto en la Ex Oz el pasado jueves 14 de mayo es algo que muchos recordaran. Reemplazando la saturación sónica con una eficaz ejecución, temas como “Shelter song”, “A Question Isn’t Answered” o “The Golden Throne” no defraudaron, llevadas algunas al extremo con largas improvisaciones y una invitación al público a unirse en su viaje. “Move With The Season” en especial, era una de las más esperadas, y aunque su versión en directo está en otra tonalidad, se convirtió de igual forma en uno de los momentos claves de la noche. El clásico instante en que todos suben sus celulares para registrar el momento.
Aunque no se puede decir que lo de estos británicos es algo fresco, su sonido rinde un generoso tributo a un fenómeno musical que, cabe señalar como punto referencial, proviene de todo lo que puede salir de la influencia del “I’am The Walrus” y/o “Strawberry Fields Forever” de The Beatles. Una fuente inagotable de pop sinfónico y lisérgico que ha tenido discípulos varios como Electric Light Orchestra, XTC (post “Skylarking”) o Kula Shaker. Temples es el nuevo en esta familia, y el debut + performance de la banda dan cuenta que las cosas las han hecho bien, y que podemos estar tranquilos de que no son unos músicos que andan de paso.
(Video de Cortando el Aire / @cortandoelaire)
Con no más de una hora y veinte minutos de show, con un par de sorpresas como el tema nuevo “Henry’s Cake” y el lado b “Ankh”, lo de Temples fue una bomba sonora que esperamos se repita muy pronto, apenas tengan nuevo material para ofrecer. La sustancia está y los fanáticos sin duda seguirán aumentando a medida que vayan apareciendo buenas canciones, como es lo natural.
Una buena noche que dejó oídos felices, como ha pasado en otras ocasiones de estos Ciclos S.U.E.N.A., siempre pensados con ojo clínico para no fallar a un público que se nota mayormente interesado en saber lo que está pasando en el rock actual, a diferencia de otros eventos con marcas encima, en los que prima más el interés comercial o fashion que el de dejar testimonio de un momento especial de la música.
