Una revelación no menor contiene el documental “Amy” que se estrenará hoy en Reino Unido. El largometraje, que busca rescatar la historia en caída libre de la malograda Amy Winehouse, ha generado molestia dentro del circulo cercano de la cantante considerando que “omitieron muchas cosas” pero esa es harina de otro costal.
Lo concreto es que el representante de Universal Music en Inglaterra, David Joseph, reveló en la cinta que él, personalmente, destruyó todo el material restante de Winehouse por una “cuestión moral”. El productor dijo que el álbum póstumo editado en 2011 era suficiente (Lioness) y que si alguien hubiera agarrado una pista de voz de la inglesa para hacer otra cosa, nunca habría sido bajo su vigilancia. Por eso, decidió eliminarlas para siempre.
Aunque no se sabe exactamente cuántos demos borró Joseph, se deduce que son, al menos, diez demos inéditos que nunca podrán ser escuchados. Un dato aún más masoquista para los viudos de Amy: el productor Salaam Remi confesó a la revista Billboard que con la autora de “Rehab“, “teníamos por lo menos 14 canciones, cualquier cosa que podría pasar estaba allí”. Brutal.
