Las consecuencias tras la aprobación de la ley de 20 % de música chilena en las radios no han culminado. Además del enfrentamiento entre la SCD (Sociedad Chilena del Derecho de Autor) y la Asociación Chilena de Radiodifusores de Chile (Archi) ahora se integra un tercer ente al panorama; un grupo de músicos nacionales de géneros menos masivos como jazz, cancionero clásico o fusión- han levantado la voz en contra de la controvertida ley pero también están impulsando una asociación de gestión colectiva paralela a la SCD.
Recordemos que desde 1987 la SCD controla los derechos autorales de los músicos del país, pero esto podría cambiar en cierta medida.
Christian Gálvez -uno de los bajistas más connotados de Chile- junto a otros insignes del jazz como el baterista Alejandro Espinosa, el multiintrumentalista Roberto Lecaros y el actual director de orquesta del Festival de Viña, Carlos Figueroa, apuestan a un cambio en la escena de la representatividad de los artistas, pues, en palabras de Gálvez; “La SCD representa sólo a un sector muy acotado de los músicos: a los que sólo apuntan a las radios. Además, a la hora de elegir a los directivos, los votos de un grupo valen mucho más que los de otro. Mientras más recaudo, más peso tiene mi voto. Y esos son los mismos músicos que después aparecen hablando de la unión del gremio y del sindicato, cuando no se dan cuenta de la discriminación”.
Por ejemplo, a la hora de elegir el Consejo Directivo de la SCD, los votos de Florcita Motuda, Jorge González o Roberto Márquez equivalen a 19, mientras que los de artistas como Christian Gálvez valen por cinco.
En los próximos meses, Gálvez y sus compañeros pretenden formar la nueva asociación ante el Ministerio de Educación. Pero antes de esto, deben renunciar a la SCD.
En tanto, Mario Rojas, primer vicepresidente de la SCD, indicó que “legalmente, es posible que existan una o varias sociedades de gestión colectiva, pero por un tema de eficiencia, la administración del repertorio se concentra en una sola”.
